La concentración de servicios en la capital, educación y trabajo, ha generado una dependencia funcional de los habitantes de los asentamientos periféricos y colindantes con el centro de la ciudad, lo que genera masivos desplazamientos cotidianos concentrados en horarios punta.

Por otra parte, se ha demostrado en el tiempo que la construcción de autopistas y vías han incrementado el uso del vehículo particular, fomentando la expansión de la ciudad con urbanizaciones periféricas de baja densidad y alta dependencia del automóvil. Este modelo de ciudad es ineficiente para la provisión de un sistema de transporte público de calidad, ya que debe recorrer largas distancias para servir una baja demanda. Estas condiciones dificulta la prestación de un servicio de transporte público masivo, eficiente y sostenible. Como solución alternativa, los servicios de trenes de cercanía de la región, ofrecen condiciones competitivas, lo que permite mejorar y ampliar el servicio, aprovechando tanto la faja ferroviaria existente, aumentando la frecuencia y ofreciendo en las estaciones polos intermodales intermedios. Estas soluciones combinadas y complementarias nos permite promover un sistema de transporte masivo, limpio y sostenible.