La educación y comunicación para la reducción de riesgo de desastres tiene en consideración las relaciones entre los impactos a la comunidad, el medio ambiente y la economía, entre otros. Promueve capacidades para el pensamiento crítico y la mejora de la toma de decisiones. En una geografía como la de la Región Metropolitana es indispensable que los ciudadanos se encuentren informados y preparados para actuar en el momento de una emergencia. Aunque es un tema recurrente, se debe avanzar en el desarrollo de nuevas estrategias y herramientas para promover la educación sobre riesgos impulsando una cultura proactiva y preventiva. Los habitantes de cada una de las comunas de la región deben conocer sus riesgos y vulnerabilidades, incluyendo memorias de los desastres ocurridos en el pasado y los diferentes escenarios a los cuales se encuentran expuestos. Esto podrá ser complementado al incluir nuevas tecnologías para generar información accesible a los habitantes de la región.